Por estos días, Buenos Aires se sacude el letargo del otoño con esa rara electricidad que solo la música puede convocar. El viernes 6 de junio, en el escenario cálido y vibrante de Niceto, volverá a latir una de las voces más sensibles de nuestra escena: Agustín Dettbarn, quien, tras una inspiradora gira por Chile, regresa a la Argentina con banda completa y un show que promete ser más que un recital —una experiencia.

Dettbarn no es solo un músico: es un narrador de lo íntimo, un cartógrafo de lo emocional. Su último disco, titulado sencillamente *Dettbarn*, despliega ocho canciones en las que cada nota es un soplo, cada arreglo una caricia meticulosamente tejida. Las huellas del trabajo colectivo laten en cada track: Matías J. Olmedo y el propio Agustín firman la producción y los arreglos, y la mezcla fue cocinada con paciencia en Estudio El Zumbido, como quien cuece un poema en fuego lento.

Pero esta presentación en Niceto no será una repetición. Dettbarn llega con un set list renovado, un repaso por su discografía completa y, como si eso no bastara, la antesala de nuevas canciones inéditas que ya dan forma a lo que será su próximo trabajo discográfico. Es el tipo de noche que no se repite, un punto de inflexión donde la música no solo suena: se transforma y transforma.

El disco *Dettbarn* no esquiva la melancolía ni el candor, y lo hace sin caer en el artificio. “Mandarine”, producido por Gabriel Luch, es un ejemplo claro de cómo la sutileza puede decir más que el grito. Las baterías, grabadas por Facundo Lizondo en Mirifico, suman profundidad sin romper la calma, y el mastering de Lucas Gómez termina de cerrar una obra redonda, honesta, que no necesita pirotecnia para conmover.

Acompañarán esa noche los paisajes visuales de Pau Vázquez Presta —responsable del arte de tapa, los flyers y videos promocionales— y de Julian Olmedo, cuyas piezas para Spotify aportan otro lenguaje a esta propuesta artística total. Porque sí, esto es más que música: es un universo.

El show contará con la presencia de Nicola Carrara como artista invitado, otra pincelada que suma calidez y variedad a una fecha que ya se perfila como imprescindible en *nuestra agenda cultural de espectáculos*.

Para quienes seguimos creyendo que una canción puede cambiarte el ánimo o abrirte el pecho, ver a Dettbarn en vivo no es opcional: es necesario. Un acto de comunión en una ciudad que, a pesar de sus ruinas cotidianas, sigue generando arte desde la entraña.

Calle del espectáculo: Cnel Niceto Vega 5507

Ciudad: Buenos Aires (CABA)

Lugar: Niceto