En el laberinto de la música independiente, donde cada acorde es un espejo que devuelve la imagen distorsionada de nuestra época, aparecen los artistas emergentes que se niegan a repetir fórmulas. COSMÉTICA, banda leonesa de post-punk con aires de ironía y lucidez filosófica, vuelve a irrumpir en la escena con su nuevo sencillo: “Cinta de Vídeo (de Porno Barato)”.

El título podría parecer una broma de mal gusto en la era de la inmediatez digital, pero detrás se esconde una crítica afilada al amor, a la política y a las convenciones que nos sostienen. Alejandro Cartujo, JuanMa Carrera y Miguel Ángel Cuervo han sabido destilar en este tema un cóctel de metáforas incómodas: la democracia como dictadura de la mediocridad, el parlamento como escenario de farsas, el amor reducido a un ejercicio tan mecánico como un VHS de saldo.

COSMÉTICA no es una aparición repentina. Su trayectoria ya los había situado en la órbita de los jóvenes artistas que desafían etiquetas fáciles. Desde el mini-LP “4 Grandes Obras de Pop Español” (2022) hasta los álbumes “Gloria” (2020) y “D.Bo” (2019), pasando por sencillos como “Discotheque”, la banda ha construido un mapa sonoro que juega entre la irreverencia y la sofisticación. Temas como “En tu piso” o “Yo maté al DJ” ya adelantaban su capacidad de provocar y seducir a partes iguales.

En este nuevo sencillo, la banda no ofrece respuestas, sino espejos rotos donde el oyente puede ver reflejada la contradicción de su tiempo. Y ahí está la fuerza de los talentos emergentes: no buscan complacer, buscan incomodar.

Si la música independiente tiene sentido es precisamente porque permite voces como la de COSMÉTICA. Voces que invitan a mirar la política con desconfianza, el amor con ironía y el arte con la libertad de quien no debe favores a nadie.

Para quienes quieran encontrar nuevos y prometedores artistas en ascenso, el espacio digital también se convierte en refugio. En la radio online de lamusicadelgarage.org suenan COSMÉTICA y otros proyectos que, lejos de las listas de éxitos prefabricados, proponen un diálogo honesto con la juventud, la cultura y las tensiones de nuestro presente.

Escuchar “Cinta de Vídeo (de Porno Barato)” no es solo oír un tema más. Es sumergirse en la sospecha, en la ironía y en el riesgo de un grupo que sigue consolidándose como referente dentro del universo alternativo español. Y quizá sea eso lo que distingue a los verdaderos artistas emergentes: el valor de construir un sonido que desafía las convenciones mientras apunta, con precisión borgiana, al corazón de nuestra realidad.